Desorganización, cancelaciones, lodo y tráfico en el Force Fest en Teotihuacán
Teotihuacán
en Línea. Genaro Olvera. La desorganización, el lodo,
las cancelaciones de bandas, el tráfico sin control, los precios de los
productos dentro del festival y hasta la entrada gratis de decenas de
asistentes colmaron de decepción a los metaleros que asistieron al que prometía
ser uno de los mayores eventos de Metal, el Force Fest Open Air en
Teotihuacán.
Tras un
recorrido realizado por el equipo de este medio, se pudo constatar que la
desorganización comenzó a jugar un papel importante en contra de quienes habían
adquirido previamente sus boletos.
Sin saber
qué hacer o dónde dirigir a la gente, los organizadores simplemente fueron
espectadores del caos vial provocado y los empujones.
Después, la
lluvia comenzó a convertir el escenario o los escenarios en piso de lodo, donde
los asistentes tuvieron que sortear la lluvia, el lodo y la descomposición de
las notas musicales de grupos como Comeback Kid y force Bank.
Ante la
lluvia, los encargados de cuidar las entradas, que ni ellos mismos sabían dónde
estaban, comenzaron a permitir el ingreso gratis, sin importar que previamente,
los asistentes hubiesen pagado más de dos mil pesos.
El sistema
cashless (pulsera de pago digital) colapsó y no quedó de otra más que comenzar
a cobrar con efectivo. Como sea, para cuando el punk se adueñó del escenario
alternativo, muchos encontraron la manera de sobrevivir al no poder comprar ni
usar el dinero que cargaron en sus brazaletes.
Afuera, el
caos vial no permitía el paso de una ambulancia. Las entradas y salidas de la
arteria de ese tramo de la carretera México-Pirámides estaba saturada. Otro
punto en la falta de organización y logística de los organizadores del
festival, quienes previamente habían “planeado” las entradas y salidas.
El caos y
la lluvia fue tal, que parte del poblado de San Sebastian Xolalpa, del lado de
la carretera México-Pachuca, tuvo que ser acondicionado como estacionamiento.
Mil
quinientos pesos por seis cervezas
Otro
factor en contra, fueron los precios. Mil quinientos pesos por seis cervezas o
ciento cincuenta por una hamburguesa. Vecinos del
lugar sacaron puestos donde ofrecían esos productos a menos de la mitad de esos
precios y se llevaron esas ganancias con ellos.
Oficiales
de tránsito estatal tuvieron que implementar un orden que por mucho, los
rebasaba.
Las
cancelaciones
Ante la
falta de logística y el temporal, Senses Fail y Lamb of God cancelaron
su presentación en Teotihuacán.
Los metaleros se sintieron estafados
La pauta molesta la dio Rob Zombie quien decidió sumarse a
sus colegas y cancelar igualmente su presentación.
Las bandas restantes cumplieron. No así la desorganización,
los precios estratosféricos, el lodo y pésimas instalaciones.
El Metal, el punk y los fanáticos entendieron el mensaje de
Quetzalcóatl en Teotihuacán: un festival de esa envergadura debe realizarse por
profesionales y no por simples mercaderes