Óptica Ciudadana ¿Todos iguales?

Óptica Ciudadana

 

¿Todos iguales?

Teotihuacán en línea. Artículo de José Luís Hernández Jiménez. Dice el Dr. Mancera, quien dice que trabaja como Jefe de Gobierno del DF, que en la CDMX (Ciudad de México) “todos somos iguales”. Si, cómo no.
Bueno, yo digo que él dice, porque en el Metro capitalino hay muchos espectaculares, que son una especie de carteles grandotes, que anuncian eso, que todos somos iguales. Y si no lo dice él, sí lo afirma uno de sus subordinados; Para el caso, eso es lo de menos, pues en dicho anuncio se habla a nombre del GDF, y con eso basta para darle mas importancia. Además, el responsable último del anuncio, como lo ha anunciado a los cuatro vientos, es suspirante a la Presidencia de la República.
El caso es que dicha afirmación, refleja ignorancia o una inclinación pseudo ideológica, hacia eso que ahora denominan totalitarismos, en los que se pregona eso, precisamente, que todos somos iguales, así sin matices.
Lo cierto, es que ni en la CDMX, ni en ninguna otra entidad federativa, ni en el país en su conjunto, vamos, ni en todo nuestro planeta, los seres humanos somos todos iguales.
Además de las diferencias más obvias, las que tienen que ver con los sexos y con las preferencias sexuales, con las razas, con las tallas, estatura, complexión, con las opciones religiosas y políticas, con las culturas, con la formación académica, hay muchas más. Más aún, en las mismas familias, entre hermanos, incluso entre gemelos, se pueden parecer en algo pero, en general, todos son diferentes.

¿Por qué alumnos que tienen los mismos profesores, no tienen los mismos rendimientos? ¿Por qué personas con similar padecimiento, que reciben el mismo tratamiento médico, no reaccionan igual? ¿Por qué individuos que han fumado mota (ahora que está de moda el tema), platican que tuvieron efectos dispares? ¿Por qué, cuando los integrantes de una misma familia, que ingieren los mismos alimentos, tienen talla diferente? ¿Por qué a unas personas gozan con el deporte, otras con la comida, otras con la lectura, otras con su trabajo,…? Pues porque no somos iguales. 
Y si ponemos atención en las emociones, en las inteligencias, en los gustos, en el funcionamiento interno de cada organismo, en las huellas digitales o en el tono de las pupilas, pues las diferencias se ahondan.
Sí estimados lectores, por ello hay un dicho popular que reza que “cada cabeza es un mundo”. Entonces mejor sería decir que los seres humanos somos iguales porque somos diferentes. Y que bien que así sea. La diversidad, la pluralidad, las diferencias, deben ser vistas, más que como problemas,  como fortalezas.
Así que cuando se hable de igualdad, hay que matizar. Los seres humanos somos o debemos ser iguales pero ante la ley. Es decir, en general, somos o debemos ser, iguales en derechos, iguales en obligaciones.  Eso sí. Y si en estos tiempos se reclama igualdad, es igualdad de oportunidades para desarrollarse con dignidad. De ahí que mas que igualdad se exija equidad. Debe haber equidad.
Es importante tener claridad en los conceptos. Porque a la hora de tomar decisiones, si estamos confusos, se pueden tomar decisiones erróneas. Y si el que toma las decisiones, es un político con poder, por ejemplo, los resultados pueden ser catastróficos.     
Tal vez, lo que quiso decir don Mancera o sus ayudantes, con esos anuncios en los que afirman que todos somos iguales, fue una cosa. Pero dice otra. En esos casos, los matices son importantes. Entonces debió decir, por ejemplo, que en la CDMX, sus habitantes somos iguales ante la ley. Luego de esta precisión, la cosa ya cambia y la discusión también. ¿Deveras los capitalinos somos iguales ante la ley? Pero esta ya es otra historia. O ¿ustedes qué opinan mis estimados?                
Notitas: Una.- Que si la Suprema Corte de Justicia de la Nación, da el sí a la petición del cuarteto de la A.C. SMART, para que pueda producir mariguana para su consumo particular, está bien. Y si ellos no dañan a terceros, esta mejor. Ora que si otros también quieren ser motorolos, pues allá ellos y sus cuerpecitos. Nomás que no involucren ni a niños ni jóvenes. Y que a mi ni se me acerquen cuando estén fumando, porque… ¡guácala de pollo con ese olor nauseabundo! Dos.-Que ya se supo: Don Raúl Castro, Presidente de Cuba, por fin aceptó venir a México. Snif, primero pactó con el imperialismo yanqui, y pal último nos dejó a nosotros. Snif. Tres.- Que muchos de esos que se dicen de izquierda, ya no tienen remedio. Ahí está otro de sus integrantes, el casi ex Presidente Municipal de Cocula, Guerrero, al que recién detuvo la PGR, cuando andaba muy del brazo y por la calle, con un líder de la banda de narcos, “Guerreros Unidos”. El problema de la izquierda partidaria no inició hoy, sino en 1996, cuando el entonces nuevo líder máximo del PRD dio un golpe de timón al rumbo trazado originalmente y… Cuatro.- Que insisto: los legisladores todavía tienen tiempo de caernos bien a los ciudadanos, sacando del Presupuesto de Egresos, todos los privilegios económicos de la clase política. El plazo para aprobarlo vence el 15 de noviembre. Que conste. Cinco.- Que para hablar del Presupuesto de Egresos, por cierto, estamos invitados. Es el martes 10 de noviembre, a las 19 horas en Concepción Béistegui 107, colonia del Valle, cerca del Poliforum Cultural Siqueiros, en el DF. Organiza “Por el Cambio con Dignidad” AC. Seis.- Que otras invitaciones, a las Presentaciones números 16 y 17, de mi libro, “Cuando correteábamos utopías”, son para el jueves 5 de noviembre, en el CCH Azcapotzalco, a las 11 de la mañana, en la Sala de Teatro; Y el viernes 6 de noviembre, en el auditorio “Sotero Prieto”, del anexo de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, en CU, a las 9 de la mañana.  Ambas presentaciones con comentaristas de renombre. Siete.- Que sigo de terco: ¡Hagamos ejercicio diario y sembremos un árbol cada año! Es por el bien de todos. ¿Va?