PGJEM detuvo a banda de presuntos homicidas y extorsionadores

PGJEM detuvo a banda de presuntos homicidas y extorsionadores

Teotihuacan en Línea. Genaro Olvera. Toluca. Alfredo Castillo Cervantes, informó que las investigaciones de seis homicidios dolosos cometidos en el perímetro de los municipios de Nicolás Romero y Atizapán, permitieron a la institución el aseguramiento de Oscar Mauricio Arapia Rico “El Parka” de 30 años de edad, Edgar Gustavo Arapia Rico “El Gus” de 27 años, policía municipal en activo, Jonathan Arriaga Fuentes “El Jonas” de 25 años, José Enrique Velázquez Ruiz “El Pelón” de 28 años, Juan Martínez Franco de 40 años, Omar Israel Estrada Calderón “El Soldado” de 29 años, ex militar, Antonieta Martínez García “La Toña”, de 44 años, Gerardo Mazaba Hernández “El Santero” de 27 años, Eduardo Mazaba Hernández “El Flaco” de 33 años, quienes participaron en los hechos ocurridos el 10 y 11 de junio, como parte de un ajuste de cuentas entre organizaciones antagónicas.
La detención de los probables responsables, se realizó en distintos operativos que implementó el grupo designado al combate de delitos de narcóticos y delincuencia organizada, en acciones simultaneas en los municipios de Nicolás Romero, Atizapán y Jiloztingo, dijo.
Cabe mencionar que el 10 de junio, el Ministerio Público realizó el levantamiento de cuatro cadáveres que fueron dejados al interior de un vehículo tipo Corsa, color negro, con matricula 495VNR, auto abandonado en la calle Prolongación Doctor Ignacio Capetillo, en el municipio de Villa Nicolás Romero.
“Horas después, se localizó un quinto cadáver en las inmediaciones de la colonia Clara Córdoba del mismo municipio, y al siguiente día fue ubicado un sexto cadáver en la colonia Capulín en el municipio de Atizapán, todos ellos relacionados con actividades ligadas al narcomenudeo”, dijo.
De acuerdo con las declaraciones, los probables responsables reconocieron que un día antes del hallazgo de los cuerpos, miembros de la banda, participaron en el “levantón” de las víctimas, a quienes trasladaron a una cabaña en el municipio de Jilotzingo, en donde fueron ultimados.
El titular de la dependencia, señaló que la banda delictiva también obtenía recursos a través de la extorsión como cobro de derecho de piso, a rutas del transporte público, al exigir cuotas de 20 a 30 pesos por cada unidad que recorría las distintas vialidades que controlaba dicha organización, así como el robo con violencia a transporte de carga. Esta actividad era dirigida por Martínez García dueña de un negocio de comida en Atizapán, lugar a donde acudían con frecuencia choferes y así sabia el tipo de mercancía y dinero que transportaban, para posteriormente avisar al resto de la banda, quienes realizaban los asaltos