Cuquita: ¡¡Ma!! ¿Quién más que tú, desde allá, y yo acá,
sabemos lo triste que ha sido todo esto?
NAVIDAD DESDE LAS VOCES DE LA AUSENCIA/VERÓNICA VILLALVAZO
(FRIDAGUERRERA)
María Del Refugio Contreras Santillán, nació el 25 de agosto
de 1962, era la décima hija de doce hermanos, la más pequeña. Su niñez fue
tranquila con toda su familia, estudió para secretaria ejecutiva, trabajó en
diversos puestos secretariales de nivel Dirección, ya, que, además de ser muy
inteligente, físicamente fue una mujer muy bonita, le gustaba arreglarse y
peinarse a la moda. Descrita por sus hijas como un ser noble, alegre,
divertida, solidaria: muy dedicada en todos los aspectos, por ello en diversas
ocasiones la elegían Reina de la primavera. Siempre soñó con ser mamá, incluso
escribió un poema llamado. “Comenzó mi sueño”.
Y, que, a ella le gustaba declamar en las reuniones familiares.
Era muy buena
cocinera, recreaba recetas que veía en YouTube, le gustaba mucho hacer
manualidades de todo tipo, mantener su casa limpia y decorada con figuras de
cerámica, girasoles y sus plantas. Disfrutaba de sobremanera escuchar música,
en especial rock en inglés, de los años, setentas, ochentas y noventas. Era
fanática de “The Beatles”, “Bread”, “ABBA”, amaba bailar música disco, le
gustaban mucho los gatos, ir de paseo a Tepoztlán en familia.
En diciembre de 1985, se casó, con Juan Carlos Montes de Oca
Barrera, con quien procreó tres hijos: Cinthia, David y Elide; como mamá fue
buena, siempre estuvo atenta a cada uno de ellos, de sus preocupaciones.
“Recuerdo, cuando nos hacía las mejores maquetas del salón,
cuando íbamos en primaria, siempre era vocal, para poder estar más al pendiente
de nosotros, en Navidad, arreglaba superbonito la casa, (bueno, ella adornaba
en cualquier día festivo). La mesa literal parecía que iba a venir Dios, sé
lucia y daba lo mejor de ella”.
Tristemente, desde su juventud luchó contra el alcoholismo,
acudió en diversas ocasiones a centros de rehabilitación, terapias
psicológicas, incluso espirituales, en su juicio tenía toda la actitud, pero
recaía. Pasaba el tiempo, no podía combatirlo y para ella era peor esa lucha,
siempre decía que ya no quería tener esa enfermedad; que quería vivir
tranquila, en paz, ella lo decía de corazón, pero nunca lo logró.
Con el paso de los años progresó, su enfermedad la orillaba
a salirse de su casa; en diversas ocasiones tuvieron que ir a buscarla o los
vecinos les avisaban dónde estaba, para ir a recogerla. Eternamente, tuvo el
apoyo de sus hijas e hijo, e infortunadamente, llegó al punto de negar
cualquier ayuda, descuidando su persona en general. Conoció gente de ese mismo
círculo que, para su mala suerte, no fueron buenas personas con ella.
El jueves 2 de marzo de 2023 tuvo una recaída, tenía meses
bien, se salió, sin saber que, ya nunca regresaría a su casa, como en otras
ocasiones. El sábado 4 de marzo de 2023, se enteraron, que habían encontrado a
una mujer adulta sin vida, cerca de un parque de su casa. “Como ella no había
llegado, nos preocupamos y comenzamos a investigar. Un conocido fue el que nos
confirmó el comienzo de esta terrible pesadilla”.
Hasta el momento, las autoridades no les han indicado quién,
o quiénes, son los responsables de lo que sucedió a María del Refugio, lo
primero que, recibieron fue, la revictimización, de parte del ministerio
público, que los atendió, quien, sin miramiento alguno, sugirió que Cuquita, se
cayó sola (por borracha), a pesar de los múltiples golpes que mostraba en todo
su cuerpo. Hoy dedican estas líneas al dolor, la ausencia y la impotencia por
no tenerla cerca.
“Mamá Cuquita: te vamos a dedicar unas palabras, mi papá, tu
papalotito (Frida, su nieta) y yo (Elide) de cómo es la vida y las Navidades
sin ti.
ESPOSO: Mary, se acercan fechas en las que te extraño más de
lo normal, porque fuiste mi compañera durante 38 años, en los cuales, tuvimos
momentos muy felices, y también, momentos muy tristes; por nuestro problema; el
alcoholismo.
A pesar de esto, tú fuiste uno de los pilares fundamentales
en mi vida. Desde que te conocí físicamente, me gustaste mucho, y con el paso
del tiempo, que fue muy corto, me enamoré de ti.
En, estás épocas que se avecinan, te recuerdo, como lo más
grato, que me sucedió en mi vida, gracias por regalarme tres hijos, los cuales
son el fruto del amor, que, siempre nos tuvimos. Mary, siempre te recordaré, y
extrañaré; hasta el último día de mi vida, espero que nos reencontremos en la
vida eterna.
FRIDA: ¡Hola, Abu!: En estas fechas navideñas es cuando más
te extraño. Todavía recuerdo que, en Navidades anteriores, te ayudaba a poner
el arbolito, y a decorar muy bonito. Pero, desde que ya no estás es muy triste,
ya que no lo volveremos a hacer como acostumbrábamos cada Navidad.
Extraño cuando me cuidabas, y, decías. ¿Quieres un coctel de
frutas?, veíamos tu novela favorita juntas, y nos quedábamos, todo el día en
pijama, extraño cuando me hacías mis comidas favoritas, extraño muchísimo, ir a
visitarte, pasear a tu perrito Luffy y salir al mandado contigo.
Te agradezco por quererme mucho, por todo lo que hiciste por
mí, por ayudarme con mis tareas cuando estaba en clases en línea en el COVID.
Ji, ji, ji. Desde que falleciste ya no nos juntamos en familia, eso me pone muy
triste. En alguna otra vida nos volveremos a reencontrar y poner de nuevo el
arbolito juntas.
Te amo con todo mi corazón, no sabes, cuánto te extraño, por
cierto, desde que ya no estás; siempre se me aparecen mariposas blancas, y sé,
que eres tú. Gracias por ser la mejor abuelita del mundo.
Elide: ¡¡Ma!! ¿Quién más que tú, desde allá, y yo acá, sabemos
lo triste que ha sido todo esto? Te fuiste y TODO se volvió un verdadero caos.
Han pasado tantas cosas horribles; que, no sé por qué, tuvieron que ser así,
aún, no logró entender, por qué tú, ¡porque nosotros, y, el porqué, de todo
esto!
La primera Navidad
sin ti, fue de los días más tristes de mi vida. ¡Y todas las que, me quedan por
vivir! ¡Literal te fuiste y todo te llevaste contigo!
Nos desunimos, me da mucha tristeza, ya que tú amabas vernos
juntos, ya nada será como antes, al contrario, quiero que, pase Navidad pronto.
Extrañaré siempre el llegar a tu casa para ayudarte a preparar la cena, bailar
y escuchar tus anécdotas de vida, y poner buenas canciones.
¡El recalentado en pijama: viendo videos de terror y
recetas! Estás fechas, ya no emocionan, son de mucha tristeza y nostalgia. Me
haces mucha falta para todo. El destino, nos hizo una mala jugada, porque no me
dejó llevarte de vacaciones al mar, no te dejó ver cómo ya puse mi local.
¡Tampoco, me dejó triunfar contigo! ¡Mi alta del tratamiento! Tanto, que, te preocupó, ¡pero a veces pienso
que Dios me regresó justo a esto, para ser tu voz!
Porque, acuérdate, que te hice una promesa, y se hará
justicia; solo dame mucha fuerza como hasta hoy, Ma. ¡También quiero agradecerte el buen gusto musical
que me enseñaste, te agradezco, el hacerme la mujer que, hoy soy!
Te veo en las cosas que me gustan, y, puedo sentirte, cuando
preparo sopa, a veces, escucho mi voz, y te escucho, o, digo cosas como tú las
decías, te veo en mis manos cuando siembro una planta, en las noches cuando, me
lavo la cara, te veo en mi mirada. Necesito, un abrazo tuyo, para darme ánimos.
En esos días tristes, ¡pero entiendo que nunca estaré sola porque siempre estás
en mí!
Gracias Cuquita, mil gracias por darme la vida, pero, sobre
todo, esa gran despedida en esa ceremonia espiritual; lo atesoraré siempre en
mi corazón, cumpliste tu misión conmigo, gracias por los grandes mensajes, todo
lo que hago, desde que te fuiste, es honrar tu vida, y, recuerda. “San
Francisco” de Scott Mackenzie, es nuestra canción por siempre, cada que suena,
te siento conmigo.
¡Duele cada día, duele con el paso de los años, ¡pero estoy
aprendiendo a vivir con este dolor! Estoy bien cansada, sí, pero le sigo
echando ganas porque después de la tormenta, vendrá la calma, y yo sé, que, nos
estás ayudando; desde ese bello lugar al que partiste.
¡Te amo por siempre, mamá, gracias por ser mi luz y mi guía!
¡Feliz Navidad, hasta las estrellas!
Cinthia y David, están viviendo su proceso un poco más
complicado, aún les cuesta mucho hablar de esto, pero el otro año, espero
puedan escribirte, tu carta navideña, sé que tú les darás la calma.
¿Verdad? Tú perrito Luffy. Te sigue
esperando.
¡TE AMAMOS Y EXTRAÑAMOS TODA TU FAMILIA!
diciembre 2024
Eres madre, padre, hermana, hermano, hija, hijo. De una
mujer víctima de feminicidio, desaparición, o intento de feminicidio: búscame,
ayúdame a visualizarlas y contar su historia. Voces de la Ausencia.
P.D. Cada uno de los textos expuestos en este espacio, son
con autorización y acompañamiento de las víctimas. Porque sólo somos, la
extensión de su grito de justicia.
@FridaGuerrera
@vocesDLAusencia